domingo, enero 30, 2011

El post de la redención...

No dejo de oír ese tic tac revoloteando en el interior de mis parietales. Ese zumbido infernal, denso y pesado. Ese latido que no deja de recordarme que soy mortal. Que, algún día, mis huesos serán pasto del polvo. Que algún día, todas mis palabras, mis acciones, todos mis recuerdos y mi jodida existencia, acabaran por adquirir un pisito con vistas en las entrañas del olvido.


Ante esa perspectiva..., me detengo. Paro, cierro los ojos, siento como la brisa arropa cada milímetro de mi piel, tomo aire, reflexiono y pienso: " que cojones haces aquí quieto?".

Actuo y lo veo claro. Me doy cuenta que, todo lo que ha sucedido, ha sucedido por un motivo. Todas las cicatrices que decoran mi armadura, tienen un significado. Todas y cada una de las vivencias que se han instalado sobre mi piel, han empezado a latir de nuevo. Que todas las risas ejecutadas, todas las lágrimas vertidas, murieron en respuesta a un fin mayor, a un objetivo mayor....


Y aquí me encuentro. El momento ha llegado. Es el instante en que se detienen los relojes y los corazones, trabajan a medio gas. Es la hora mágica, cuando oyes crujir tus propias pupilas, y eres consciente de la vida que atesoras.
Cara a cara, con la oscuridad del desfiladero. En pie, frente al miedo que, durante tanto tiempo, ha governado mi vida.
Me mira...y le devuelvo la mirada.
Me habla y respondo.
Intenta detenerme pero..., hoy no.

Durante largos años has sido mi escudero pero, ya no hermano...




Reproductor: Coldplay - Yellow

1 comentario:

Anónimo dijo...

uuuaaaauuuuuu, adoro esta canción.
Aranzazu